Una gran verdad del feng shui
Una gran verdad del feng shui
Mira.
Una vez me dijeron una gran verdad, de esas que escuecen:
“No se vive el tiempo suficiente para aprender todo lo que se necesita para conseguir la vida que una desea para sí misma y los suyos. Para lograrlo, es absolutamente necesario encontrar a la persona que ya ha pagado el precio de aprender las cosas necesarias para lograr nuestros objetivos.”
Así que, o somos esa persona, o somos la otra.
Ésa es la única forma de conseguirlo.
Si estás aquí, lo más seguro es porque no eres la persona que ya ha pagado el precio de tener que aprenderlo.
Una gran verdad del feng shui
Bien.
Querer hacerlo todo por ti misma es un esfuerzo a veces demasiado grande, un estrés, una pérdida de tiempo y a veces de dinero.
Porque esto te lleva más tiempo y te expone a realizar errores, a la posibilidad de tomar decisiones equivocadas.
Debes centrarte en lo que realmente eres buena y contar con alguien que se encargue de proyectar tus propósitos en tu hogar.
Contar con alguien que lo haga bien es más rápido, directo y eficiente para una vivienda sin bloqueos energéticos y sentir mayor paz.
Seguro que puedes hacerlo por ti misma. Cogiendo conceptos adecuados. Dedicando día y noche a estudiar y practicar en lugar de pasar tiempo con tu familia.
Y aún así, ¿el resultado estará a la altura de lo que quieres?
Hay una buena razón por la que escribo los artículos de mi blog:
Conceder el poder a otra persona.
Saber qué exigir a un profesional para que analice tu vivienda y sepa potenciar las mejores energías de tu casa así como curar las más desfavorables.
Saber si tiene en cuenta tus motivos y a todos los miembros de tu familia.
Saber diferenciar un buen trabajo de feng shui de otro que no lo es.
Saber en quién delegar uno de los aspectos más críticos de tu vida, tu hogar.
Hay muchas cosas en las que tú eres irremplazable en tu casa. En ellas es en las que debes concentrar tu tiempo.
Una gran verdad del feng shui
Para todo lo demás, sé la persona que encuentra a la que ya ha pagado el precio de aprender las cosas necesarias:
Maddie, quiero que te encargues de analizar y mejorar las energías de mi casa
Bueno.
Pues esto era lo que quería decirte.
Ahora. Si prefieres hacerlo todo tú misma, tengo un par de cursos permanentes de feng shui que funcionan de maravilla.
Un abrazo,
Maddie «yo ya he pagado el precio» B.
Para sentirte a gusto en tu casa y que tu bienestar, relaciones familiares y prosperidad fluyan mejor, en el enlace de arriba.
Una gran verdad del feng shui
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